Aniversarios Ovni 2007 y creación del CEFAA

Este año 2007 es un año de aniversarios ufológicos. En primer lugar, se cumplen 60 años desde el inicio de la era moderna de la investigación del fenómeno, nacida en 1947 con el avistamiento de los primeros “platillos voladores” por el piloto norteamericano Kenneth Arnold sobre el monte Rainier, en Washington. Por otro lado, se cumplen 30 años de la extraña experiencia vivida por el cabo chileno Armando Valdés, supuestamente abducido en la pampa nortina en abril de 1977 mientras realizaba labores de patrullaje junto a sus camaradas. Y, finalmente, se cumplen 10 años de la creación del Comité de Estudios de Fenómenos Aéreos Anómalos, CEFAA, el primer organismo oficial de nuestro país dedicado a investigar y catalogar los objetos voladores no identificados presentes en nuestro espacio aéreo.

El CEFAA se activó como consecuencia de la cooperación entre investigadores civiles y Fuerzas Armadas. Sin embargo, hay un caso ovni ocurrido a fines de marzo de ese año en el aeródromo Chacalluta, Arica, que representó un importante reconocimiento oficial a la realidad del fenómeno ovni. De hecho, para muchos es el antecedente que aseguró la creación del CEFAA. El comunicado oficial dice:

"Ante las versiones periodísticas relacionadas con el avistamiento de un ovni en la ciudad de Arica, la Dirección de Aeronáutica Civil señala que efectivamente personal del Aeropuerto Chacalluta de Arica, al igual que gran parte de la población, avistó en la madrugada del día 30 de marzo, aproximadamente entre las 01:00 y 02:00 horas local, un objeto luminoso estático, al Sur Oeste de la ciudad sobre el mar, sin que se pudiera apreciar con exactitud el tamaño, distancia ni altura a la que se encontraba dicho objeto. Tampoco se pudo determinar si se trataba de un fenómeno meteorológico astronómico o de otra naturaleza. El día 31 a las 00:30 horas aproximadamente, se repitió el fenómeno. Pese a que la hora del avistamiento no había tráfico aéreo reportado en ese sector, se le consultó a una aeronave en vuelo de Buenos Aires a Lima, por una de las rutas oceánicas establecidas, y que pasa a 200 millas náuticas de Arica si observaba el fenómeno siendo su respuesta negativa. El avistamiento tampoco fue detectado por el radar que sirve al extremo norte".